El sexto número de éste circular literario "Fonemas, letras, palabras, frases y esas cosas…" os muestra esta vez un relato corto titulado "Lleno y Sin plomo; por favor". Está publicado en el nº 23 de RUIDO Fanzine independiente de La Palma, . Fue escrito durante el 2003. También la ilustración corre de mi cargo. Espero que os guste, ya me dirán:
Sin plomo y lleno por favor
Paramos en una gasolinera, pregunto donde está el baño, me señala unas escaleras q van a dar a un subterráneo, las escaleras son largas con descansillos grandes entre puertas y luz tenue, en uno de los descansillos están las puertas de Male y Female, entro en Male y las escaleras continúan. Al llegar abajo es muy amplio, con algunos lavaderos y sus respectivos espejos. Entro a uno de los compartimentos del wáter y resulta q es una gran habitación, con un gran wáter-bañera del que cuelga un cartelito con una silla de ruedas. Meo ahí, en la inmensidad del wáter. Me acerco caminando por dentro de ese gran wáter a la cadena de la cisterna, tiro y me veo empapado, salgo, me quito los tenis y la ropa para quedarme en boxers, blancos, y veo una pequeña rampa que sube a otra habitación llena de bañeras, ya-cusís y extrañas pocetas de agua limpia, todo incrustado en el suelo, de la habitación sube a mi derecha una gran rampa de hormigón, como las que están contiguas a las escaleras de la playa de Puerto de Naos, (de las que no se ve el final). En la habitación hay cuatro chicas sentadas, aunque parecen más, hablo con ellas en saludo, no las conozco de nada. Me acerco a una de las pocetas de las cual en cuyo en interior se aleja un túnel sumergido a mi frente. Toco el agua de esa poceta y se levanta bruscamente, como si el fondo la golpeara cruel, bruscamente; y como si al tiempo quisiera agredirme, me alejo estrepitoso, la chica gordita me advierte que le ocurrió lo mismo, y yo en calzoncillos.
Intento subir a gatas por la rampa, las chicas también suben, es empinada, me resbalo a 10 metros de camino a causa de mis pies mojados, se ríen, regreso a por los tenis, al habitáculo del wáter, pero decido subir por las escaleras, abro la puerta del compartimento del retrete, el hall del baño posee la sensación de una película de zombis. Abro la puerta, enciendo la luz, entro a las escaleras y cierro la puerta, comienzo a subir y desaparece la escalera al oscuro abismo a cuatro pasos de mi, y de pronto surge como un gran ente de mi antiguo profesor de teatro, y me dice q tengo q rezarle a dios para q me ponga las escaleras, yo le digo q soy ateo, pero él me insiste, debo rezarle el credo, yo no me lo sé y él me reprende, tras repetirme el rezo un par de veces me lo medio invento, Antonio me dice q lo haga con énfasis, yo no entiendo... pero lo hago; y resulta. Me subo a las escaleras a forma de salto y se me lleva como alfombra voladora, nos difuminamos.
Fundido a negro.
Aparezco en ciudad de Apolos, ciudad de los cielos, con enormes esculturas sobre peanas levitantes, alrededor de la misma, palacios, grandes plazas y gente extraña...
®